El acné se ha convertido en una patología cutánea que genera poros inflamados en las zonas del cuerpo afectadas, ¿lo sabías? Por lo general, se observan presencia de brotes o espinillas con exceso de grasa.

Al continuar leyendo, podrás ubicar ¿cuáles son los factores que generan alteración en el rostro? Y ¿qué acciones seguir para visualizar cambios a favor de un rostro atractivo? Te veo dentro del post.

¿Qué es el acné? 

Es una enfermedad cutánea, caracterizada por lesiones o incomodidades en el cutis. Su aparición se enfoca en la salida de folículos infecciosos en el cutis que le dan apariencia áspera o incomoda al cutis.

Por lo general, es una patología caracterizada por la presencia de células muertas dado por la aparición de granos abultados sea en la espalda, rostro o pecho. Este fenómeno se origina por la producción de hormonas como andrógenos que empeoran la aparición de gránulos.

Por otro lado, algunos dermatólogos catalogan o enfatizan en la presencia de condición fisiológica dada por el desequilibrio hormonal que origina la presencia de patología inflamatoria que genera poros  faciales inflamados.

Por tanto, dado a la aparición células con grasa se originan brotes o lesiones que originan un cutis con espinillas y brotes en la cara o partes cercanas que dan un aspecto incómodo.

Causas del acné: ¿Cuáles son?

En situaciones se desconoce, ¿porqué se origina el acné? En la mayoría de las circunstancias está asociado con los desequilibrios hormonales, sean durante la adolescencia o en fases de menstruación. 

Cabe señalar, que existen otros aspectos asociados a los cambios físicos o detectables en el acné, entre los que destacan:

Producción desacelerada de glándulas sebáceas

La activación de glándulas sebáceas y la estimulación, ocasiona que la producción se mantenga bajo un proceso desordenado, interfiriendo a la inflamación o infección cutánea de los poros faciales.

Proliferación de bacterias

Aquellas que se encuentran en la flora cutánea que originan la producción de  bacteria Cutibacterium acnes que incide en el rompimiento del poro y estimula la producción de bacterias como Staphylococcus aureus que causan infección.

También, se origina la inflamación contraproducente que aportan aspecto de cutis dañado o granos con pus.

Alteración de microbiota cutánea

Los trastornos o mal funcionamiento hormonal interfiere en la aparición del acné sin importar se la fase adulta o adolescencia de la persona.

¿Cómo tratar el acné?

Los tratamientos de acné, pueden variar según el tipo de producto o la apariencia que se mantenga del cutis. 

También, podrás seguir un par de pasos que pueden complementar, siendo funcionales según las condiciones iniciales del cutis, para ello puedes seguir los siguientes pasos:

Lavar y secar el área de la piel afectada

Esta patología presenta aparición con frecuencia en áreas como (nariz, frente y mentón) la denominada T. Una sección que se expone a deterioros o daños faciales por desequilibrios hormonales.

Se recomienda lavar el área con regularidad para arrastrar la suciedad o componentes que intervengan en la acumulación de grasa  o agentes externos que alteren las condiciones de  pH o buen funcionamiento de la piel.

Exprimir y aplicar la cantidad de producto

Algunos cosméticos, tienen un tamaño selectivo o forma de guisante, es decir, de fácil acceso sin requerir de receta para su compra. Por lo general, es un producto con fácil aplicación y no requiere del uso de un récipe médico para comprarlo.

Incluso es recomendado por su baja dosificación en áreas específicas, sea en secciones exclusivas con abultamientos por ejemplo: hombros, cutis, espalda, entre otras. 

Masajear el tratamiento en el rostro

Las aplicaciones pueden realizarse haciendo frotación en la zona con cremas recomendadas para quitarlas imperfecciones o incomodidades. 

Aunque algunas se pueden adquirir en cualquier centro o farmacia, otras puede recetar el dermatólogo e indicar la cantidad del tópico y formas de masajear el área. 

¿Qué tipo de productos usar para el acné?

Aunque algunos tratamientos se usan como selectivos según las indicaciones médicas, otros pueden adquirirse y aplicarse de forma recurrente siguiendo las instrucciones según el empaque. En caso de aplicar mascarillas faciales y cremas, podrás ajustarse a los siguientes pasos:

Verifica el tipo de piel

Los tipos de pieles son variables, sin duda no podrás usar un parche facial para un cutis grasoso o piel seca. Por tanto, debes considerar, ¿cuál es la condición inicial del rostro?

No servirá si estás usando la mascarilla o crema para piel seca, mientras presenta un cutis con exceso de sebo y pieles variables entre ellas están:

Un tipo de mascarilla hidratante y nutritiva para quitar presencia de poros inflamados que aporten textura de piel inflamada.

Al mejorar el exceso de sebo o brillo del cutis y presencia de espinillas y poros con retención de pus.

Aplica mascarillas una vez por semana o según indicaciones

Ten presente que algunas mascarillas están indicadas para una vez por semana, es decir, se recomienda hacer uso de los productos un día semanal, ya que, su acción y efectividad está ajustada a los requerimientos diarios.

Un complemento de cuidado que debe implementarse como parte de la rutina diaria para aminorar la apariencia de acné. Para ello, debes considerar algunos parámetros

Enjuaga con abundante agua

Al finalizar su aplicación coloca abundante agua para eliminar el exceso de la mascarilla. Con ello arrastrará la presencia del cosmético y la piel estará regenerándose progresivamente. 

Un producto fabuloso para calmar la piel irritada y con poros inflamados aquellos que inciden en la piel con abultamientos y espinillas. Por lo general, este cosmético se adecúa a piel sensible o rojiza por tanto, será conveniente adecuarse a las necesidades.